Muchos de nosotros estamos pasamos gran parte trabajando y la mayoría no tenemos un lugar para hacerlo adecuadamente, por lo que no debemos perder de vista la importancia que tiene para nuestra salud física y emocional.
Es de vital importancia encontrar y adecuar un espacio para el trabajo, en la medida de nuestras posibilidades, debemos considerar varios factores entre los cuales el más importante es: la adaptación a tus características físicas y a tus necesidades de trabajo esto se llama ergonomía, si lo hacemos podemos prevenir lesiones en músculos, nervios, articulaciones y vasos sanguíneos de piernas, cuello y espalda principalmente y todo ello consecuencia de no tener una buena postura al sentarse.
Detengámonos a pensar…
¿ La silla donde trabajo tiene soporte lumbar para que mi espalda baja este firme y me permita trabajar sin cansarme ?
¿ Tiene riñoneras para soportar mi área renal y dar firmeza a mi postura ?
¿ Se puede ajustar no solo la altura del asiento sino la profundidad del mismo de acuerdo a mi altura y complexión ?
¿ Cuenta con sistema de reclinamiento para descansar la espalda aún estando sentados ?
¿ Tiene curvatura en el asiento para para que las corvas descansen y que mi circulación sea fluida sin la sensación de piernas dormidas ?
¿ El acojinamiento es confortable y firme para permitir varias horas trabajando sin sentir cansancio ?
La silla es de suma importancia por lo tanto la mejor opción es invertir en una silla apropiada para trabajar, para así vivir toda una experiencia de comodidad, productividad y salud mientras trabajamos.
